Una de las cosas más satisfactorias de los que amamos a los perros es verlos crecer sanos, fuertes y activos. Nos convertimos en testigos de cómo, a través de su desarrollo, van cambiando su carácter y su comportamiento. Y lo que si no cambia es su amor leal e incondicional, por ello te recomiendo tener en cuenta esta nota.
Para que esto sea posible, su nutrición es parte fundamental. A simple vista podría pensarse que todos los perritos necesitan el mismo alimento, pero conforme los vamos conociendo, nos damos cuenta que cada uno de ellos tienen sus propias necesidades, por ende debemos tener mucho cuidado al momento de elegir el tipo de alimentación que le daremos a nuestro perro.
Aunque los perros no puedan comunicarse con nosotros, sí tienen la capacidad de expresarse y transmitirnos sus necesidades y sensaciones. Ahí radica la importancia de ir monitoreando y conociendo a nuestra mascota conforme ésta va creciendo, para distinguir sus gustos y lo que le molesta.
¿Qué debe contener la comida de los perros?
La nutrición de nuestro perro debe contener aportes de todos los nutrientes y en cantidades suficientes para satisfacer sus necesidades, es decir, sin excesos pero tampoco carentes. Por lo tanto, es muy importante conocer el alimento que se le proporciona; no a todas nuestras mascotas se les recomienda el mismo alimento, por lo que, reiteramos, es fundamental saber qué es lo que requiere antes de darle la comida. En este caso se aconseja consultar a su veterinario, su opinión puede garantizar el desarrollo y la salud del animal.
Por ejemplo, para un perrito Junior, es muy importante que su alimentación le garantice su desarrollo para que crezca fuerte y sano.
Un perro adulto, por su alto nivel de actividad, necesita un alimento con alta nutrición, con dosis adecuadas de proteínas y calorías que lo mantenga en forma.
Y por su parte, para un perro Senior su alimentación tiene que ayudarle a mantenerlo saludable.
Existen estudios que comprueban que hay razas que requieren que su alimento se adapte a su metabolismo para prevenir patologías a las que su raza las hace propensas. Por supuesto que ésto no significa que todos los trastornos se eviten con la alimentación adecuada, pero sí es preventiva en casos como la sensibilidad digestiva y dermatológica, para evitar excesiva formación de sarro en los dientes, la tendencia al sobrepeso e incluso a la formación de cálculos urinarios.
¿Es bueno cambiar de vez en cuando la comida del perro?
Habrá quienes prefieran mantener el mismo tipo de comida de por vida, sin embargo, expertos en el tema recomiendan que de vez en cuando se cambie el alimento para que la mascota adhiera a su cuerpo otro tipo de propiedades, además de darle gusto a su paladar con la variedad. Lo único que se tiene que tomar en cuenta antes de hacerlo, es verificar los ingredientes del nuevo alimento y si es recomendable para la edad del perro que lo va a ingerir.
Tampoco está de más darles a nuestros animalitos un placer de vez en cuando y que disfruten de un alimento que no dañe su estómago, por ejemplo, jamón cocido o cualquier otra opción; lo único que recomendamos es comentarlo con su médico para que éste les dé ideas y que el gusto que le darán a su mascota sea la correcta y no les afecte. Tengamos en cuenta que cada animal es diferente, por consiguiente sus necesidades y gustos también lo son.
La importancia del agua en la alimentación balanceada de un perro
No nos olvidemos del agua, tan fundamental como el alimento, por lo tanto habrá que tenerla en cuenta como parte de su nutrición. Es importante la limpieza y el cambio del líquido, y en épocas calurosas, que esté fresca.
Resumiendo, el calcio, las proteínas y las calorías son tres elementos indispensables en la alimentación de nuestros perros ya que, si desde cachorros se toman malas decisiones en cuanto a su alimento, su proceso de desarrollo se verá interrumpido o alterado y cuando sean adultos podrían aparecer ciertos problemas o enfermedades no sólo relacionados con la digestión, si no que, como ya vimos, padecerán diversas patologías.